Migrantes provenientes de diversas naciones de Centro y Sudamérica continúan su travesía hacia el norte de México, con rumbo a la Ciudad de México. A pesar del endurecimiento de las políticas migratorias del gobierno de Donald Trump, las caravanas siguen llegando a Oaxaca, con la esperanza de alcanzar la capital del país.

Muchos de estos migrantes planean establecerse temporalmente en la Ciudad de México, donde buscarán empleo para cubrir sus necesidades, antes de retomar su viaje hacia el norte y, eventualmente, cruzar a Estados Unidos.

El 27 de enero, alrededor de 200 migrantes llegaron a La Ventosa, en Juchitán, Guerrero, luego de recorrer 380 kilómetros desde Tapachula, Chiapas, desde donde partieron el 12 de enero. Algunos presentan lesiones a su llegada, como Mónica, una migrante ecuatoriana que viaja con un menor de edad. “Tengo la pierna mal, los pies llenos de ampollas, y la mayoría estamos resfriados por el frío”, compartió Mónica.

El flujo migratorio en el sur de México sigue en aumento, con migrantes de diversas nacionalidades llegando a Oaxaca. Ante las amenazas de deportaciones masivas por parte del gobierno de Trump, muchos optan por pausar su marcha hacia la frontera estadounidense y, mientras tanto, buscan trabajo en México, esperando que la situación en la frontera se estabilice.

La caravana continúa su ruta hacia la capital oaxaqueña, con la intención de avanzar hacia el centro del país en los próximos días.